Muestra poética de Diego Alonso Sanchez Barrueto
Puedo decir que a estas alturas del partido, el poeta Diego Alonso Sánchez Barrueto (Lima, Perú 1981) está creando filigranas poéticas. Ya en sus obras anteriores (Se inicia un camino sin saberlo, 2012; Por el pequeño sendero interior de Matsuo Bashö, 2009 y Mitsuya Nicolás y otros poemas, 2002) nos mostraba un trabajo muy delicado atravesado por la quietud y pasión oriental.
Este poema es una incitación a leerlo, a disfrutar sus versos, a seguir esta voz de rica tradición en nuestra poesía...
(La hija mayor del secretario de ministros)
Mi padre es uno de los hombres de confianza del Emperador, y mi Señor ha decidido casarme con alguien de beneficio.... La noche anterior a la ceremonia de matrimonio, repentinamente, un joven caballero decide hacerme una visita, a pesar que solo nos conocíamos de lejos cuando una vez cruzamos las miradas en los jardines de palacio. Silenciosamente me abandoné a sus requerimientos y, cuando quedé dormida, salió de mis aposentos como si fuera un fantasma. A la mañana siguiente encontré esta breve nota sobre la almohada:
Este poema es una incitación a leerlo, a disfrutar sus versos, a seguir esta voz de rica tradición en nuestra poesía...
(La hija mayor del secretario de ministros)
Mi padre es uno de los hombres de confianza del Emperador, y mi Señor ha decidido casarme con alguien de beneficio.... La noche anterior a la ceremonia de matrimonio, repentinamente, un joven caballero decide hacerme una visita, a pesar que solo nos conocíamos de lejos cuando una vez cruzamos las miradas en los jardines de palacio. Silenciosamente me abandoné a sus requerimientos y, cuando quedé dormida, salió de mis aposentos como si fuera un fantasma. A la mañana siguiente encontré esta breve nota sobre la almohada:
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